Enorme especie de Buey melenudo, lento, pacífico y de anchas narinas, característico de los valles de las Tierras Salvajes. Su tamaño es unas cinco veces mayor que un caballo e históricamente se ha usado como animal de carga y labrado.
Se atribuye a los Irios su domesticación y el secreto con el que mezclar la estéril simiente de este extraño y tranquilo animal que ha influido en muchas culturas humanas de la región desde los años anteriores a la Gran Brecha. La distancia entre sus patas, por ejemplo, fue estandarizada por los Irios como una vara, medida que todavía se sigue utilizando en algunas poblaciones.
El secreto de su origen se ha perdido en los anales de la historia, pero realmente los kuokos son una bestia creada por los arcanos de Natur y heredada por los Irios a modo de regalo. La sangre de esta criatura está muy bien valorada por los alquimistas, pues posee extrañas propiedades en la elaboración de pociones y rituales. Y la lengua sigue manteniendo un papel especialmente relevante en rituales paganos, asociándose normalmente a figuras sociales de poder.
